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Showing posts from 2010
"lasss ammmmmooooo amiguisssssssss" Al interesante mundo del facebook... yo le llamo "el mundo bello". Allí todos sonríen. Cuerpos hermosos, poses, músculos, curvas, labios, tatuajes; hay de todo. Además, cada quien se describe como un ser excepcional, con las mejores cualidades posibles... sincero, fiel amigo, incorruptible, alegre, sensible, filántropo. Otros se venden, perdón, se muestran en escenas familiares, la ternura, los viajes, sus posesiones, el liderazgo, la abuelita canosa o el perrito; tantas cosas como casos. Hay quienes se convierten en teólogos a conveniencia, moralistas, filósofos doble cara, seguidores de causas, pandilleros sentimentales; casi la maleta del encantador de serpientes con todos los aceites. Qué mundo este del facebook. Realmente es el desdoblamiento de las represiones... los dos minutos de fama, la oportunidad del coqueteo, mírame que te miro, el culto a lo grandioso. Claro, hay marcadas y contundentes excepciones a la tendencia, é
Cantares del subdesarrollo (y ¿qué es subdesarrollo?) El álbum musical “Cantares del subdesarrollo” me gustó. Me recordó mucho los años ochenta, los pregones, el estilo de ese tiempo, Calidonia, Vía España, la política y el color popular que tenía la Ciudad. Reconozco que no soy un conocedor profundo de la salsa ni de todos sus ingredientes, sin embargo el trabajo de Blades simplemente cumple en mí la posibilidad de transportación y disfrute. ¿Qué más necesito? Algunas letras contienen una clara expresión religiosa santera y otras el simple sabor a conversación y jodedera de esquina. Así de fácil. Sin mucho maquillaje ni adorno son narraciones interesantes que dibujan a los personajes con facilidad y permiten meterlos en escenarios conocidos. Por ejemplo, el tartamudo que pretendía sexo fiao, lo imaginé en las cantinas del mercado, por allá en La Bocatoreña o La Mayor. O como el tipo que reta a pelear a otro que nunca llegó, este me hace ver lo contrario de la realidad actual
Dueño de sus emociones. Se dice que uno decide cómo sentirse. Nadie puede construir o destruir su felicidad, excepto uno mismo. Lo externo, las circunstancias, casi siempre condicionan y controlan nuestro estado emocional porque no hemos aprendido a manejarnos. Es decir, los hechos siempre se darán, pero la manera en que nos sentimos y reaccionamos es lo que nos corresponde, es nuestra elección. Esta tarea no es fácil pues generalmente debemos cambiar un esquema formado desde la niñez y reforzado a través de los años. De ahí que escuchemos a personas decir: "es que yo soy pocas pulgas", o "...tiene un carácter". Una misma frase, dependiendo de dónde proviene, es manejada de distinta manera. Podemos asumir la posición de ofendidos o ignorar esas palabras sin ninguna secuela. Ahora, no estoy sugiriendo ser el congo del grupo, hablo de reaccionar asertivamente. Saber que si te enojas o no, es por libre elección, o si eres congo también es por libre decisión. Hag
Firmín De Sam Savage Firmín es hijo de una madre alcohólica. Por cabezón y feo se diferencia de sus hermanos que tempranamente hacen burla de él. Firmín es una rata que crece en una librería y vive un extraño encuentro entre su mundo y el mundo humano. El hambre lo lleva a roer las páginas y cubiertas de los libros donde creció y poco a poco logra una transformación interior: aprende a leer. Así empieza un viaje de ilusiones que va creando con la personalidad de los protagonistas leídos y nos lleva a todos a recorrer sus anhelos. Firmín intenta escribir un libro de su vida pero no encuentra una frase suficientemente cautivadora que enganche al lector. Esta inicial frustración nos deja entrever un poco su perfil y el sentido general de la obra. Savage otorga a Firmín análisis y sentimientos y a través de ellos logra describir al dueño de una librería y a un escritor fallido con los que vivió. A pesar de sus complejos, la rata analiza la realidad humana desde una perspectiva limitad
Vaivenes, de Kansuet. Una forma de vaina, parecida a la del guandú cuando cambia de verde a chocolate. Unos flecos despintados, escurridos desde la hamaca, capullo de niño, de niña, dormidos, con los ojos en el centro del pecho, soñando quizá con lo que jugaron en el día. En sus caras se asoma la felicidad que es bella, con olor a sudor y canto, pintada con manchas vibrantes como cuando el sol dibuja sombras en las cosas y derrama las manos de Kansuet sobre los lienzos. De nuevo me encuentro con esos caminos que hace el sudor cuando se escurre en los cachetes colorados y que sospecho que es donde Lucio humedece sus pinceles, pues no hay otra forma en que recoja tanta naturalidad. Y ese perro hermoso, amarillo, hoci largo, de bigote criollo, de paso ligero y brincón, cuando juega con esos chiquillos que ahora duermen en las hamacas guindadas de los bastidores. La galería Allegro está presentando del 9 de junio al 10 de julio de 2010 la exposición Vaivenes, de Lucio López Cansuet (Kan
Día, mes, año. En el renglón siguiente, después de nombre y apellido, decía “fecha de nacimiento”. Lo llené rápido, día, mes y año, instintivamente y continué con el formulario. Cuando llegué a casa, por alguna razón reflexioné sobre ese asunto de la fecha de nacimiento. Parece tonto, pero se me fue armando un argumento más complejo que el simple trámite de escribir en un papel. La fecha de nacimiento inicia el cronómetro de la vida de una persona desde su alumbramiento. Esto nos permite saber lo obvio, su edad; pero además nos define un marco o época porque inmediatamente lo relacionamos con un “cuándo más amplio”. Viendo la fecha de nacimiento de Isaac Newton, por ejemplo, asociamos su época, entorno social, moda, condiciones tecnológicas, etc. Es como la banderita en la línea del tiempo. Ya con esto vemos que la historia necesita de las fechas para referenciar, y los profesores de la cátedra, para calificar. Otro aspecto que se relaciona con la fecha de nacimiento son los si
Jean-Pierre El sentido de la vista nos permite captar nuestro entorno por medio de la luz. Así, un objeto en un cuarto oscuro no será visto, aunque allí se encuentre. La observación se liga al sentido de la vista. Ver y observar no es lo mismo, los diferencia un ingrediente fundamental. Jean-Pierre Brion es un belga que vive en Panamá y anda observando nuestro país, armado de un equipo que le permite congelar sus observaciones y paradójicamente convertirlas en visiones a través de sus fotografías. Sí, Jean-Pierre camina los lugares urbanos y rurales tomando del entorno la imagen y narrando a través del silencio una historia. Avispado en su andar no pierde oportunidad de llenar de luz su lente y decirle a los continentes sobre todo lo que hay en nuestra tropicalidad, en nuestros indígenas, en nuestros bailes y raspaos colorados con leche condensada, en nuestros perros amarillos de hocico largo, en las calles de guayacanes y costas cercanas. Asumo que el calor del istmo lo sedujo y l
Rascando el cielo Un día fui al edificio Century Tower en la Tumba Muerto, frente al ex-gimnasio Kelly's fitness, a una diligencia en el piso 6. Al entrar al vestíbulo me recibió una fila de personas que esperaban para firmar un libro en donde se anotaba el nombre, número de cédula, motivo de la visita, oficina, y hora de entrada y salida. El seguridad comparaba los datos contra un documento de identificación personal que te devolvía inmediatamente. Después de este requisito podía uno pasar al interior del gran edificio de ventanas verdes. Media hora después, terminada mi tarea, bajaba por las escaleras evitando la demora de los ascensores. Me sorprendí al ver que el espacio era bastante reducido, no ví lámparas de emergencia (de esas que se encienden cuando falla la electricidad) y el acabado de los escalones era irregular, no por ser de cemento, sino por las pegotes y excesos que no quitaron cuando los hicieron. Mientras bajaba pensé en cuánta gente podía contener esta sali
La carrera de vivir y vivir la carrera Mi prima Margaret está en los 40 años. Es alta, delgada y en apariencia bastante callada hasta cuando la "picas" y te das cuenta que en realidad es una buena conversadora. Con el tiempo he aprendido que los silencios también son parte de las conversaciones amenas. Resulta ser que Margaret es corredora, no de carros, ni de aduanas, sino de piernas y zancadas. Un día me encontré con un artículo en el periódico que comentaba sobre una maratón (ultramaratón) de 50 millas, unos 80.4 kilómetros, que se realizó en California, en la que participaron varios panameños, entre ellos Margaret. Su posición de llegada final fue la 428 y su tiempo 13 horas con 22 minutos. Esa noche, los últimos pensamientos del día merodeaban esas 13 horas y 22 minutos. ¿Cómo hace uno para correr tantas horas seguidas? O sea, desde que había leído la noticia hasta la hora de acostarme todavía no habían transcurrido las trece horas. Visto de otra manera, primero ll
CLICK AQUI... Vídeo corto de presentación de David Róbinson en Confesiones de un poeta en una ciudad que odia. “Confesiones de un poeta en una ciudad que odia” Autor: David Róbinson El libro “Confesiones de un poeta en una ciudad que odia” es ácido. Es un texto sin rodeos, directo, sin metáforas ni complacencias. Trata estrictamente del amor. Róbinson escribió con los puños una pelea con el plural que terminó en singular, sea yo, tú o él. ¿Quién se confiesa?, ¿quién odia? Como biólogo, David parte de la célula social, la familia. Joaquín, el protagonista, sufre la ausencia del amor, de ese mismo amor que se usa como excusa para fornicar en pensiones y para sobar la entrepierna de chiquillos. Afortunadamente existe la televisión porque nos mantiene estúpidos y tan necesariamente cambiables como para sobrevivir en un mundo de constante movimiento. No importa la ausencia del amor como esencia, de eso se encargarán los organismos internacionales cuando lean las confesiones de sus s
¿Mosca, super mosca, gallo? Algo ocurre últimamente en varios de nuestros boxeadores que no están haciendo el peso adecuado para sus peleas. Seguramente hay una explicación menos complicada que la emitida por un entrenador que dijo algo así: -A consecuencia del calentamiento global y el debilitamiento de la capa de ozono, seres extraterrestres han aprovechado para colarse en nuestro planeta, instalándose inadvertidamente en los gimnasios, afectando a nivel celular el metabolismo de nuestros deportistas, principalmente boxeadores, hecho que se refleja en la incapacidad de bajar de peso-. Señores, la respuesta a esta situación, lejos de la propuesta tipo Ovni, está en el cuerpo de los boxeadores, exactamente ¡en su cabeza! Muchos de ellos han olvidado uno de los aspectos principales del boxeo: la categorización. La categoría define los límites de peso en donde se realizará el combate, esto elimina la ventaja de ser más pesado que el oponente. Sin embargo, el boxeador profesional, insisto
La dominación ha sido parte del hombre y en el hombre en un siempre histórico. Siglos atrás miles de africanos fueron sacados de sus tierras y vendidos en América para usarlos como esclavos. Hombres y mujeres servían en distintas tareas sin la menor consideración a su dignidad y obviamente sin garantías. Los africanos no eran esclavos, fueron esclavizados. Actualmente encontramos en muchos países la herencia de la cultura africana adaptada a las circunstancias y condiciones de las regiones donde se asentaron. Las quilombolas eran espacios geográficos que expresaban la lucha de clases en el régimen de la esclavitud. Eran locales de difícil acceso, pero dotados de áreas para la caza, pesca y el cultivo. Compartían también mulatos, indígenas y descendientes de europeos que se sentían marginados de la sociedad. El Museo de Arte Contemporáneo de Panamá está presentando (marzo, abril, 2010) una muestra fotográfica de las quilombolas en Brasil. Costumbres, prácticas, características, or
Haití, los espíritus en la tierra. Ojos que te miran directo a lo desconocido. Lenguas frenéticas, asomadas en sus guaridas de huesos y sal. Cuerpos deshinibidos. Esperanza negra, blanca, roja, violeta, cifrada en velas, cruces, licor y agua. La vida maquillada de muerte, y los hombres pidiendo a los muertos riqueza, invulnerabilidad, salud, prosperidad. ¿Acaso no es el hombre creación de Dios? ¿Dónde encuentra la súplica su germinación? ¿No viven ya los espíritus en la tierra? La esperanza de un pueblo, la figura tangible del espíritu invocado, el trato y contrato resuelto con lo que está más allá de lo comprensible, la devoción religiosa que sustenta el todo. Haití, tierra y mar, negros esclavos, lamento lúgubre y doloroso que se escucha en el monte cuando la negra pare más esclavitud y más esperanza rebelde. La alianza Vudú nacida en el corazón, de cambiar la opresión por libertad. Los espíritus andan la tierra, la selva, el río y los vientos, llegan de
“El hilito” Llegó a mis manos, a mis ojos, por tropiezo en la biblioteca de mi sobrina Mariel, un libro como pocos, de una profundísima belleza y sencillez inusual, “El hilito”. El hilito es un libro pequeño, un cuadrado de 4.5 pulgadas, impreso a dos tintas, verde y negro. El hilito es una narración de lo que es la realidad, la describe sin describirla, porque uno como lector, mientras lee, piensa en su realidad. El libro es una inducción a verse en un paralelo formidable, una acción inmediata, como si se tratara de dos pistas superpuestas, una en la lectura, otra en la singularidad de nuestra realidad. Para mí, lo sustancial de El hilito es que sus textos son brevísimos y acertados, escasa una línea muy corta; además el complemento gráfico con dibujos lineales sencillos que contienen la profundidad de ese texto minimalista, pero capaces de condensar, sintetizar la idea rotundamente. ¡Qué manera de enfocar la realidad! El tino de manejar un tema tan complejo de un
La caja tonta y los tontos Parece que los productores de series y telenovelas se quedaron sin imaginación y simplemente donde uno arranca, los demás siguen. Por lo que veo les es más fácil hacer como en el ciclismo, que el puntero rompa la brisa y sostenga la presión psicológica, mientras el pelotón atrás pedalea hasta cuando alguno quiera despuntar. Lo triste de esto es que nuestros canales de televisión, por las razones que ellos mismos crearon, siguen ofreciendo a la audiencia producciones viciadas de violencia y antivalores que cada vez fragmentan, dañan y corrompen a la juventud y entorpecen las iniciativas que otros grupos con menos recursos intentan realizar por el mejoramiento de nuestra sociedad panameña. Resulta que el domingo en la noche, a eso de las siete, interrumpen la programación, entre comillas juvenil, para dar paso a una entrevista desde nuestro aeropuerto, con una de las actrices de una novela que narra las peripecias de los narcotraficantes y líderes ma