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Estimado amigo David, no es primera vez que me pasa, aunque hasta anoche creo haber encontrado la respuesta a tan terrible situación.

En un tablillero que tengo en casa acomodé algunos libros que en su momento leí. Cuando me paro frente a ellos y repaso sus lomos con la intención de releer alguno, caigo en el desconcertante abismo de no acordarme de qué tratan, es como si por primera vez los estuviera viendo. Comprenderás que la angustia empieza a crecer cuando tomo alguno, veo la portada, la contraportada y repaso sus hojas con la esperanza de que algún pasaje me revele una pista, jalar un hilo por donde se derramen los recuerdos... pero nada.

Me acosté casi a medianoche.
Tratanto de calmarme cerré los ojos y recordé que meses atrás fui abducido por seres exógenos. Concluí que ésta era la razón que afecta mi memoria.

Cuando desperté en la mañana, llevé el libro de H. P. Lovecraft junto a los otros.

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